El 20 de noviembre se celebra cívicamente el aniversario de la Revolución Mexicana, cuyos efectos no se puede decir que hayan sido positivos pues después de tantos años el país se encuentra envuelto en una crisis de muchos tipos.
Entre que le exigimos a España una disculpa, nos peleamos con Perú por proteger a gente que da golpes de Estado, y ser unos tibios frente a Venezuela, nos deja claro que el gobierno es un caprichoso, y solo protege a la izquierda violenta.
Nuestros estados modernos tan inclusivos, tolerantes y democráticos, buscan continuamente, en nombre de la neutralidad religiosa, cancelar todo aquello relacionado con el cristianismo.
Utilizamos cookies para asegurar que damos la mejor experiencia al usuario en nuestra web. Si sigues utilizando este sitio asumiremos que estás de acuerdo.Acepto