Ante el sufrimiento que padecen miles de personas por la violencia ejercida por grupos criminales, la cual afecta en gran medida a las regiones más pobres de estados como Chiapas, Guerrero, Estado de México y Michoacán, es necesaria una respuesta ciudadana que fomente la paz y la unidad en el país, aseguró Rogelio Ibarra, coordinador general del grupo Sinergia por la Paz.
Este miércoles de ceniza este movimiento, integrado por agrupaciones sociales, educativas y religiosas a nivel nacional, llevó a cabo la Jornada por la Paz en las inmediaciones de la Catedral Metropolitana de la Ciudad de México en la que se reflexionó sobre el fenómeno de la inseguridad que tiene sometidas a miles de personas, familias y comunidades y la manera en que los ciudadanos deben actuar para revertir esta situación y lograr vivir en tranquilidad.
Rogelio Ibarra indicó que la celebración de la cuaresma le ofrece a los mexicanos la oportunidad de revisar los factores que están causando dolor e inestabilidad entre las familias, pero debemos hacerlo fomentando la unión y solidaridad con aquellos que más están sufriendo para cambiar las estructuras corrompidas que no permiten la acción de la justicia.
Por otra parte, Raymundo Molina, quien participa como miembro del equipo coordinador de Sinergia por la Paz, dijo que “si el crimen organizado mantiene a los pueblos sitiados, secuestrados, intimidados y amenazados en muchos poblados de México, nuestra respuesta no puede ser la indiferencia o la normalización de la violencia” al hacer eco del mensaje que el obispo de la Diócesis de San Cristóbal de las Casas, Monseñor Rodrigo Aguilar Martínez pronunció hace unos días en su mensaje de cuaresma.
En un mensaje emitido por el prelado a los medios de comunicación en el que convocó a las jornadas de ayuno, oración y caridad por la paz, enfatizó la decisión de la diócesis a su cargo de “seguir por los caminos de diálogos para la resolución de conflictos y como constructores de paz”.
Resaltó que “la propuesta es realizar nuestro ayuno y oración sobre todo este 14 de febrero, Miércoles de Ceniza, y los viernes de cuaresma, especialmente el Viernes Santo, pidiendo a Dios por la paz para nuestros pueblos y comunidades, procurando cada quien fortalecer nuestro proceso de conversión, y suplicando al Buen Dios que, quienes tengan intereses egoístas en nuestro territorio cambiemos nuestra mente y corazón, pidiendo por la conversión de todos en la medida que hayamos perdido el camino y nos dediquemos al mal”.
Para Molina Martínez, la unión de todos los mexicanos contra la violencia es el primer paso que debemos dar para empezar a recomponer el ambiente social corroído por la acción de los grupos criminales.
Asimismo, indicó que es necesaria la exigencia de la sociedad a las autoridades para que actúen con firmeza para proteger la seguridad de los pueblos que en la mayoría de los casos no tienen los recursos para defenderse de las agresiones de las bandas criminales.
Finalmente, comentó que Sinergia por la Paz tiene preparado este año diversas actividades para fomentar el diálogo y la búsqueda de alternativas para disminuir la violencia en las comunidades.
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