Incompetencia criminal

SIN DUDA

Este sexenio pasará a la historia como el modelo de incompetencia, ocurrencias, administración por intereses ideológicos de corrupción y poder político a costa de lo que sea, incluido el sufrimiento de la población, el dolor de los más enfermos, de los padres y madres de familia a quienes ya no alcanza el ingreso para resolver los problemas básicos de los hijos; pero además, el mecanismo perverso de insistir en la fantasiosa quimera de decir que los pobres van primero.

LOS RIESGOS SON ELEVADOS

Todos los días, a todas horas y en cualquier espacio de este país, hay protestas, bloqueos, manifestaciones, exigencias de justicia, señalamientos de tortuguismo de las autoridades investigadoras, gritos de vecinos y poblaciones enteras demandando seguridad porque ya nadie quiere salir, como dicen los rancheros, cuando está pardeando la tarde-noche, por temor a un asalto, robo de vehículo, celular, bolsas de mano, mochilas y hasta ropa.

El tema se agrava por la impertérrita declaración de algunas autoridades: “Seguimos investigando” que, en análisis final, todo mundo tiene claro que tal investigación puede durar hasta parusía o segunda venida de Jesucristo.

¿POR QUÉ ES UN RIESGO?

El escribano considera que el tema es harto espinoso porque pueden devenir dos acciones relevantes: La primera es que, se incrementen el número, causas, toma de carreteras, bloqueos y expresiones de protesta, de tal forma que, el país -ante el mundo- genere al percepción de un nivel de ingobernabilidad terrible que, por lo mismo, abra para el gobierno federal, la tentación irresistible de ordenar -el señor es el jefe máximo de las fuerzas armadas- la represión en contra de los manifestantes o bien, un terrorismo basado en las amenazas y la intimidación para obligar a callar a las voces que disienten del poderoso; o como el mismo señor dice: “De los poderosos y los potentados” y así, dar la impresión de que, como el que calla otorga, todos le aplauden las acciones de represión.

DENTRO DEL TIEMPO

El señor sabe que se le está acabando el tiempo, pero eso no es lo que le impide dormir. El asunto de fondo es que su corcholata, cuando sienta el deleite del poderío político, empiece a marcar su propia línea, su personal estilo de gobernar y la definición de sus prioridades que, como sucede en todos estos casos de la política mexicana, no coinciden con el presidente saliente, porque la persona entrante quiere sentir cómo surge de su mano la innovación y, en consecuencia, romperá con el pasado… con todo lo que signifique el pasado y subordinación al anterior mandato.

LA PRISA PRESIDENCIAL

Por esto es comprensible el modelo de hacer las cosas con absoluta prisa, trompicado, de forma torpe y violentando cuanta norma jurídica se le ponga enfrente. Trae prisa por armar el andamiaje ideológico que lo proyecte como el líder nacional-socialista de una Latinoamérica bananera.

Lamentablemente para la causa de la 4T, el señor no tiene el talento de Lula da Silva, la elegancia perversa de Cristina Fernández, la picardía torpe de Maduro, la capacidad de debate de Correa ni la personalidad de su admirado Díaz Canel, el emperador cubano.

Víktor Frankl sostenía que nos pueden quitar los bienes, destrozar nuestras tradiciones, atentar contra nuestra vida…pero lo que nunca nos podrán quitar es nuestra libertad. Eso es lo que hoy encabeza Xóchitl Gálvez.

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* Las opiniones expresadas en esta columna son de exclusiva responsabilidad del autor y no constituyen de manera alguna la posición oficial de yoinfluyo.com

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