No hagas por tus hijos lo que ellos puedan hacer solos

Tengo muy grabada la frase de un especialista: toda ayuda innecesaria es una limitación para el que la recibe. Y a esto hace referencia el capítulo de un libro titulado Como educar a personas exitosas.

Y se refiere a la independencia que debemos lograr como papás en nuestros hijos. Recordemos que son prestados, que nuestra labor como educadores es guiarlos e irlos soltando poco a poco para que sean hombres y mujeres autónomos y productivos en la sociedad.

Los ejemplos son muchos: vestirlos, hacerles la tarea, darles de comer cuando pueden hacerlo solos; inscribirlos en la universidad, realizar sus trámites o encubrirlos cuando hacen algo mal; o bien, ya de adultos, seguirlos manteniendo, hacerles su cama, lavarles su ropa y darles comida.

¡Por eso existen los ninis! Sino hubiera padres que los sobre protegieran, tendrían que valerse por sí mismos.

¿Cuáles son los frutos de hacer que nuestros hijos sean independientes?

  • Desarrollo de la creatividad por hacer cosas nuevas.
  • Se despierta en ellos la curiosidad.
  • Aprenden a cometer errores, a equivocarse y volverlo a intentar.
  • Su seguridad y autoestima se reafirma
  • Se relacionan mejor con sus compañeros.
  • Sabrán tomar las decisiones que mejor les convenga cuando sean jóvenes.
  • No se dejarán llevar por la presión del grupo o los amigos.
  • Contarán con el reconocimiento de sus pares.

No se trata de dejar que los niños sean completamente libres. Como adultos somos los guías, quienes les hacemos descubrir todo de lo que son capaces. Cada niño tiene sus tiempos y sus propias necesidades, se trata de ser respetuosos e intuitivos para que su desarrollo sea armónico y ante todo feliz.

María Montessori, la gran educadora, transmitió esta idea: cuando un niño se siente seguro de sí mismo, dejará poco a poco de buscar la aprobación en cada paso que da.  Esto lo seguirá aplicando durante su juventud y después adultez.

Con este sencillo mensaje no solo lograremos que nuestros hijos sean más independientes, sino también más felices.

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* Las opiniones expresadas en esta columna son de exclusiva responsabilidad del autor y no constituyen de manera alguna la posición oficial de yoinfluyo.com

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