No normalicemos la desgracia

“La política es algo intrínsecamente moral y la primera condición de la política es ser justo”.

Desgracia: Situación de quien sufre un suceso doloroso, o un suceso que produce dolor o pena.

No permitas que te pase esto, no permitas que en la vida diaria a ti, a tus familiares o amigos les gane la costumbre de ver día a día la desgracia que vivimos. Creo todos por las noticias, por las redes sociales o por medio del internet nos enteramos de los sucesos que pasan en México y el mundo, y lo que se hace es quitar esa nota, mentar madres, quejarnos, enojarnos o simplemente poner oídos sordos la realidad está frente a nosotros. La desgracia nos acompaña.

Estamos viviendo en México, a causa del discurso de división de López Obrador, momentos de tensión, momentos de incertidumbre y por lo tanto momentos que nos deben llevar a la reflexión y a la acción. Ver cuál es la verdad y cuál es la mentira, ver cuál es la realidad de vida o la ficción que maneja López. Me hace recordar a Napoleón que decía “Nada puede ir bien en un sistema político en el que las palabras contradicen a los hechos. López habla y habla, pero sus hechos son solo resultados de tragedia.

Llevamos 5 años con un Titular del Ejecutivo que solo obtiene resultados en su mente fantasiosa y vengativa, 5 años de insultos, 5 años aguantando que México se hunda cada vez más, el señor López ya no pone más circos porque le siguen creciendo los enanos, y sus aplaudidores cada vez son menos y ya no llena las funciones. Podemos revisar sus “banderas” más importantes con las cuales en sus discursos le permitieron llegar al cargo que tiene y veremos solo reveses. Y hace unos días decía en un programa de radio, no es que solo quiera atacar, me encantaría aplaudirle, pero no hay de que aplaudirle.

Primero los pobres: Falló. Su política social ha ido de mal en peor, sí regala nuestro dinero y hace feliz a millones, pero no les ha dado beneficio alguno que les permita tener una vida digna. Hay más pobreza en México, los alimentos más caros, SEGALMEX falló. No hay servicios de salud, por lo tanto más enfermedad y muerte lo que da en dinero para comer, lo usan para medicinas. Sembrando vida, no siembra nada, y el campo productivo abandonado. Los jóvenes con dinero pero no con trabajo fijo y seguro, no los ha alejado de la delincuencia.

En lo económico no hay crecimiento, no hay más y mejores empleos fijos, la economía informal crece, la migración otra vez desbordada. La inversión pública por los suelos, no hay obras que generen riqueza, que generen progreso, no hay estímulos a la inversión. Sus tres obras insignias son un fracaso total, la pista y la terminal aérea que hizo en Santa Lucía anunciada como aeropuerto no funciona, aprovecho su aerolínea un fracaso. El Tren Maya inaugurado y sin terminar ni funcionar bien, pero además dijo ni un árbol se cortará, no, cortó miles de árboles. La refinería de Dos Bocas no refina nada, no está concluida y ni esa cosa ni el fierro viejo que compró en Texas ha ayudado a que la gasolina baje a 10 pesos el litro. Por cierto en esas tres tonterías gastó 6 veces más de lo presupuestado.

La delincuencia está cada día peor, ya nadie se sorprende de la cantidad de violencia y muertes que hay en México, esta situación deshumaniza. Extorciones, secuestros, terror en las carreteras, cobros de piso, narcotráfico todo eso sin remedio. No hay política pública para actuar y darnos tranquilidad. 

En salud, no estamos como en Dinamarca, estamos peor que en Venezuela, no da una y lo grave es que las consecuencias las pagan los niños, los jóvenes, los ancianos. El pésimo manejo de la Pandemia generó más de un millón de muertes, “cifras oficiales” rondan por los 800,000 como sea es demasiado, el homicida de López Gatell decía que 60,000 muertes sería una catástrofe, pues lo fue. Y qué decir de la corrupción está peor que nunca, su pañuelo blanco solo es una señal como en los toros para que le corten el rabo y las orejas.

Y como si algo faltara pare sellar el fracaso rotundo de este mal gobierno el día 5 nos presenta con bombo y platillo su última ocurrencia: Reformas a la Constitución y a leyes secundarias. El Presidente debió entender que para conmemorar la Constitución no había que hacer reformas, habría que respetarla, habría que cumplirla y eso es lo que menos hace. Y cómo se siente el todopoderoso, siente que en él recaen los tres poderes de la Unión hace su teatro en el antiguo salón Legislativo. A su carpa de circo le abre dos pistas más, con pocos payasos en el acto y sí muchos animales.

Esa serie de iniciativas que van dese reformar el Poder Judicial, a desaparecer instituciones autónomas hasta cuidar a los animales del maltrato son solo cortinas de humo, son solo distractores en pleno proceso electoral, son bolas de humo que lanza para aumentar su popularidad, pero él mismo lo dijo “Esto servirá para que si regresan los retrógradas les cueste más trabajo eliminar lo hecho” No busca el Bien Común busca satisfacer su ego, sellar su venganza.

Po eso te digo no normalicemos la desgracia, es momento de exigir, es momento de actuar, le quedan 8 meses pues a pedir que cambie su forma de ver las cosas o por lo menos que le pare al daño, que le pare a su venganza, que baje su rencor. Y a los que le aplauden por estar resentidos mejor pensar en lo que debe ser la política para que todos vivamos mejor. La desigualdad y la pobreza no se acaba creando más desigualdad y pobreza, se acaba generado mejores condiciones de trabajo y salarios.

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