Más de 40 millones víctimas de esclavitud moderna

El término de esclavitud moderna se utiliza como un término general que abarca diversas prácticas como el trabajo forzoso, el matrimonio forzado o trata de personas.


Abolición esclavitud


La celebración del Día Internacional para la Abolición de la Esclavitud, fue proclamada en 1985 para conmemorar el Convenio para la Represión de la Trata de Personas y de la Explotación de la Prostitución ajena, aprobada por la ONU el 2 de diciembre de 1949. Desde entonces, casi más de 70 años atrás, los números de este flagelo son aún dramáticos y alarmantes: 40,3 millones de personas en todo el mundo son víctimas de la esclavitud moderna, según la Organización Internacional del Trabajo (OIT). Los más afectados de manera desproporcionada por esta lacra, son mujeres y niñas representando el 71% del total, casi 29 millones. Del total de víctimas, un 25% son niños, alrededor de 10 millones.

El término de esclavitud moderna se utiliza como un término general que abarca diversas prácticas como el trabajo forzoso y el matrimonio forzado. Con ella, se hace referencia a situaciones de explotación en las que una persona no puede rechazar o abandonar debido a amenazas, violencia, coerción, engaño o abuso de poder. Si bien el trabajo infantil no entra dentro del término general de esclavitud moderna, normalmente se suele relacionar con ella.

Los informes preparados por los órganos de las Naciones Unidas y las ONG demuestran aún la persistencia de las viejas formas de esclavitud que subsisten al amparo de creencias y costumbres tradicionales. Esas formas de esclavitud son el resultado de una discriminación arraigada contra los grupos más vulnerables de la sociedad, como las personas consideradas de casta inferior, las minorías tribales y los pueblos indígenas.

Según los últimos informes de Naciones Unidas, se estima que unos 25 millones de personas estaban atrapadas en trabajo forzoso; de ellas, 16 millones eran víctimas de la explotación laboral forzada en el sector privado (trabajo doméstico, la construcción y la agricultura), alrededor de 5 millones eran víctimas de la explotación sexual forzada; y poco más de 4 millones (16% del total) del trabajo forzoso impuesto por las autoridades del Estado. Junto con formas tradicionales de trabajo forzoso, como el trabajo en condiciones de servidumbre y la servidumbre por deudas, existen en la actualidad formas más contemporáneas como el de los trabajadores migrantes que son víctimas de la trata.

Sobre el matrimonio forzado, la ONU calcula que 15,4 millones de personas eran víctimas de matrimonio forzado en un momento dado en 2016. Además que, más de una tercera parte de todas las víctimas del matrimonio forzado eran niños al momento del matrimonio, y casi todos de sexo femenino.

En los datos más actualizados sobre el trabajo infantil, la ONU dice que alrededor de 152 millones de niños están sujetos a trabajo infantil, de los que lo que 88 millones son varones y 64 niñas.

“El mayor número de niños entre 5 y 17 años víctimas del trabajo infantil se encuentra en África (72,1 millones), seguida por Asia y el Pacífico (62 millones), América (10,7 millones), Europa y Asia Central (5,5 millones) y los Estados Árabes (1,2 millones). Aproximadamente una tercera parte de los niños, entre 5 y 14 años, en trabajo infantil está fuera del sistema escolar, 38% de los niños entre 5 y 14 años que realizan trabajos peligrosos y casi dos terceras partes de los que tienen entre 15 y 17 años trabajan más de 43 horas por semana.

Según los Objetivos de Desarrollo Sostenible, y en particular la meta 8, que promueve el crecimiento económico sostenido, inclusivo y sostenible, el empleo pleno y productivo y el trabajo decente para todos, no podrán ser alcanzados a menos que se intensifiquen en forma drástica los esfuerzos para eliminar la esclavitud. Por ello, es necesario adoptar medidas inmediatas y eficaces para erradicar el trabajo forzoso, poner fin a las formas contemporáneas de esclavitud y la trata de personas y asegurar la prohibición y eliminación de las peores formas de trabajo infantil, incluidos el reclutamiento y la utilización de niños soldados.

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