Repensar la educación XII

Veremos ahora los retos que los educadores deben afrontar si realmente desean ejercer como verdaderos maestros. 

La vida de un maestro no es carismática ni se apoya en ciencia infusa. Consiste en mostrar a los alumnos la verdad y entusiasmarlos a que la busquen. Y en mostrar el bien y enseñar a practicarlo. El reto es eliminar en los alumnos el desinterés, la pasividad o el conformismo. Y desgraciadamente muchas veces contrarrestar el mal ejemplo. Solamente así los educadores serán felices porque estarán llevando a cabo la construcción del fin al que estamos llamados los seres humanos.

El educador ha de empezar por conocerse y comprenderse. Esto es un trabajo fundamental.  Luego ha de practicar la verdad y fomentarla en el conocimiento especulativo y en el práctico. Y a la vez actuar bien para dar buen ejemplo, característica de un auténtico maestro. Lo cual no excluye el hecho de que hay equivocaciones, pero lo importante es darse cuenta, rectificar y disculparse si confundieron a alguien.

 Estos esfuerzos hacen de las personas auténticos educadores, pues el conseguir buenas bases dota de medios para ser científico de la educación: muestra la verdad de su especialidad, y también porque su modo de actuar -siempre en el bien- le lleva a dar buen ejemplo. Todo esto es lo más opuesto al relativismo, al subjetivismo y descarta cualquier ideología.

Como la labor de los maestros es muy exigente y el entorno bastante adverso, les pueden ayudar algunas tareas. Buscar siempre las respuestas a: qué es, como es, por qué es, todo ello da seguridad y confianza. Las respuestas encontradas en lo real, dan prestigio y capacidad de valorar la realidad tal cual es. Y aceptar tal cual la realidad es el fundamento de vivir en concordancia con la verdad.

La consecuencia inmediata es aplicar la verdad al conocimiento intelectual y al conocimiento práctico.

La verdad en el conocimiento intelectual o especulativo consiste en admitir la concordancia de la cosa que se conoció con la huella producida en el intelecto Al resultado le llamamos “concepto”. Este es el primer paso en el conocimiento intelectual. Pero siguen otros dos pasos: juzgar y razonar.

La verdad en este primer momento -técnicamente llamado simple aprehensión– siempre se da, en todos los casos y en todas las personas. Algo semejante sucede cuando tomamos un vaso de agua, siempre circula por el aparato digestivo. La conclusión es que todas las personas tenemos la verdad en el resultado de la simple aprehensión. El concepto formado siempre es verdad porque tiene total correspondencia con el objeto exterior que lo produjo. Este hecho explica que en el fondo siempre hay remordimiento cuando mentimos. Porque la verdad ya la tenemos.

Veremos ahora las dos operaciones siguientes. El juicio consiste en unir o separar el concepto recién recibido con otros que ya tenemos, por ejemplo: podemos decir mesa grande (unimos). Este momento es muy importante pues es donde la persona que conoce se da cuenta de que conoce. En esta fase del conocimiento puede darse la verdad o la falsedad, si la persona une conforme a la realidad es veraz, si separa y así está en la realidad también es veraz. Obviamente no es veraz cuando une o separa lo que no es así en la realidad.

Después del juicio que es la segunda operación sigue la tercera operación y es el razonamiento. Consiste en unir o separar juicios para llegar a una conclusión. Si se une lo que por naturaleza sí se puede unir, se mejora y está uniendo de acuerdo a la verdad. Si se une lo que no es concordante está faltando a la verdad. Por lo tanto, si se une o se separa de acuerdo con la realidad se obtiene una conclusión verdadera.

Precisamente la ciencia es el resultado de relacionar conclusiones verdaderas y con ellas se propone una teoría. Dicha teoría se necesita experimentar para comprobar la posibilidad de que la conclusión a la que se había llegado teóricamente es posible en la realidad. Si la realidad confirma la propuesta teórica, esa teoría puede afirmarse con seguridad que es verdadera. De allí la importancia de la realidad.

La verdad en el conocimiento práctico se alcanza experimentando muchas veces varias hipótesis para ver cómo funcionan, en qué condiciones y los resultados obtenidos. Cada hipótesis consiste en llevar a la práctica el resultado de un razonamiento y así se puede comparar la afirmación teórica con lo que realmente sucede en la realidad.

El proceso requiere pasos. Primero se analiza el contenido del juicio, luego se eligen los medios para unir o separar. Finalmente se revisa el resultado y se compara con lo propuesto en el razonamiento y decir con claridad si sucede lo dicho en el razonamiento o no. En cualquiera de los resultados siempre se avanza porque si el resultado confirma la teoría ya se puede afirmar con seguridad, se repite y se aplica.

Si el resultado no confirma la teoría también se avanza porque con toda seguridad se puede impedir que otros actúen del mismo modo. Es frecuente que otras personas caigan en el mismo error y se pueden evitar las pérdidas de tiempo. 

Este es el modo de comprobar cuál es la hipótesis verdadera y darla a conocer como algo totalmente comprobado. Así otras personas continúan experimentos a partir de los ya confirmados, y los avances pueden ser más rápidos. Este modo de proceder es excelente porque parte de una verdad comprobada y multiplica los bienes.

También es necesario hablar de la verdad en la conducta. Ésta consiste en explicar los hechos tal cual suceden, sin falsearlos para hacer posible a otros gozar de los adelantos obtenidos.

Enseñar la verdad a los alumnos es el modo de satisfacer las inquietudes intelectuales y enseñar el bien también satisface las inquietudes morales. Si esto no se enseña o se muestra pseudo verdad o pseudo bien se están forjando personas descentradas, inseguras o trasgresoras y rebeldes porque tienen un malestar íntimo debido a la desorientación o a las profundas inquietudes mal satisfechas.

La verdad es eterna e inmutable porque las cosas mientras existen son así.

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* Las opiniones expresadas en esta columna son de exclusiva responsabilidad del autor y no constituyen de manera alguna la posición oficial de yoinfluyo.com

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