Cuando muchos países aún ven el cuidado como un asunto privado, Chile lleva más de 15 años construyendo un sistema articulado que acompaña a niños, familias y cuidadores desde antes del nacimiento. Chile Crece Contigo (ChCC) ha sido una innovación política, técnica y cultural: un modelo de protección integral que hoy inspira a gobiernos de la región.
Lanzado en 2006 y consolidado como política pública en 2009, Chile Crece Contigo articula servicios de salud, educación, protección social y apoyo emocional para acompañar a las personas desde la gestación hasta la adolescencia, con énfasis en la primera infancia.
Componentes esenciales:
- Acompañamiento prenatal y postnatal a través del sistema de salud.
- Salas cuna, jardines infantiles y centros de atención integral infantil, con prioridad para población en vulnerabilidad.
- Apoyo a cuidadores con materiales, visitas domiciliarias, talleres y redes de apoyo.
- Desarrollo psicoemocional y estimulación temprana como ejes fundamentales.
- Coordinación interinstitucional entre ministerios de Salud, Educación, Desarrollo Social y Justicia.
Datos clave
- En 2023, Chile Crece Contigo atendió a más de 1.3 millones de niños y niñas menores de 9 años.
- El 85% de los recién nacidos en el sistema público fueron acompañados desde la gestación.
- Se han creado más de 2,000 espacios de estimulación temprana en consultorios y jardines infantiles.
- El gasto promedio por niño atendido es de aproximadamente 220 USD anuales, con mayores recursos en zonas vulnerables.
- El programa cuenta con una red nacional de 345 municipios con oficinas locales de la niñez.
Impactos documentados
- Desarrollo infantil temprano – Evaluaciones de UNICEF y el BID confirman mejoras significativas en el desarrollo cognitivo y emocional de niños que reciben acompañamiento ChCC en comparación con quienes no lo reciben.
- Reducción de brechas – ChCC ha sido clave en reducir desigualdades desde la cuna. Familias pobres, rurales o monoparentales acceden a apoyos integrales que antes no existían.
- Articulación institucional – El programa obligó a distintas instituciones a coordinarse y compartir datos, lo cual ha fortalecido la eficiencia y trazabilidad de las políticas sociales.
- Reconocimiento internacional – ChCC ha sido reconocido por la OCDE, la CEPAL y la OIT como una buena práctica en política social, e incluso se ha replicado en Uruguay, Colombia y Perú con adaptaciones locales.
“Me llamaron desde el consultorio cuando estaba embarazada. Me dieron apoyo psicológico, materiales y después entramos a jardín. No me sentí sola nunca”, cuenta Ximena, madre en Talca.
“Trabajo en una sala de estimulación. Ver a los niños desarrollarse y a sus mamás confiar, aprender, avanzar… es emocionante”, dice Claudia, educadora ChCC.
“Este programa me permitió tener tiempo, apoyo y herramientas. Hoy mi hijo habla mejor, juega más y yo estoy más tranquila”, relata Sofía, madre adolescente en Renca.
Desafíos y reformas necesarias
- Aún hay desigualdad en calidad y cobertura entre zonas urbanas y rurales.
- El personal a veces enfrenta sobrecarga y falta de formación específica.
- Es necesario consolidar el cuidado de adultos mayores y personas dependientes, que hoy no están cubiertos plenamente por ChCC.
Lecciones para México
- Un sistema nacional de cuidados puede empezar por la infancia y crecer hacia otros sectores.
- La coordinación interinstitucional es clave para el éxito y la eficiencia.
- El acompañamiento desde la gestación es una herramienta poderosa para la equidad social.
- Invertir en la niñez no es asistencialismo: es política de desarrollo de largo plazo.
Chile ha demostrado que, incluso con limitaciones presupuestales, es posible construir un sistema de cuidados efectivo, humano y transformador. Chile Crece Contigo es más que un programa: es un nuevo pacto social que pone a las personas en el centro desde su nacimiento. Para México, representa una inspiración tangible y adaptable, con lecciones listas para ser implementadas.
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