La Madre Teresa es un ejemplo de una vida consagrada a los más vulnerables, por ello, se adoptó la fecha de su muerte para conmemorar el Día Internacional de la Beneficencia.
En la actualidad hay muchas formas en las personas buscan como “regresar lo mucho que han recibido” o simplemente manifiestan su solidaridad ante los problemas de los demás. Esta preocupación por actuar en favor de los demás no es nueva y sin ser privativa sólo de Occidente, sí se puede rastrear que los últimos dos mil años muchas instituciones hoy vigentes tuvieron su origen en la “caridad”, o el amor.
Esta virtud que dentro del cristianismo se considera una de las virtudes cardinales junto a la fe y la esperanza, es incluso considerada la reina de las tres pues en la meta de llegar al Paraíso, ni la fe ni la esperanza tendrán ya cabida, sólo la tendrá la caridad. Una de las últimas personalidades que han destacado en el mundo moderno por regir su vida por esos principios fue la Madre Teresa de Calcuta, quien en la Iglesia Católica ha recibido el máximo reconocimiento por su labor cuando en 2015 fue canonizada.
Sin embargo, su labor no es sólo reconocida por los católicos, sino que el aniversario de su muerte, el 5 de septiembre de 1997 ha sido elegido para marcar el Día Internacional de la Beneficencia.
Un ejemplo de actividad en favor de otros
Nació en 1910 en Macedonia del Norte, con el nombre de Agnes Gonxha Bojaxahui. En 1931 hizo sus votos como monja y cambió su nombre a Teresa, así en español, pues había otra religiosa ya lo usaba en francés, por admiración a santa Thérèse de Liseaux. En 1948, adoptó la ciudadanía india y poco después en 1950, fundó las Misioneras de la Caridad.
Su labor personal y de la orden se centró en la atención a los pobres, enfermos, huérfanos y moribundos empezando por los de Calcuta y extiendo su trabajo a muchos otros países. En 1979, recibió el Premio Nobel de la Paz. Los fondos del premio, así como la visibilidad obtenida por el mismo los usó para extender la atención a los vulnerables. Estuvo al frente de las Misioneras de la Caridad hasta poco antes de su muerte a los 87 años, habiendo dedicado a la atención directa de los más pobres, 45 años.
El asunto sigue pendiente
Sin lugar a duda el ejemplo de vida de la Madre Teresa de Calcuta resulta muy importante para todos los que buscan que el mundo sea un mejor lugar y con menos personas en situación de vulnerabilidad.
Desde hace años, se ha trabajado en buscar indicadores que permitan describir más adecuada lo que se considera pobreza y además contabilizar a quienes la padecen. En 2019, se había calculado que en el mundo cerca de mil 300 millones de personas viven en lo que se ha definido como pobreza multidimensional, es decir, que no tienen de forma cotidiana acceso a agua potable, saneamiento, nutrición saludable y educación primaria.
Las cifras totales del aumento de la población que por la pandemia ha caído en esa definición todavía están por definirse. Sin embargo, queda claro que la necesidad apoyar a las organizaciones de la sociedad civil que se enfocan en este problema es impostergable.
Sirva el Día de Internacional de la Beneficencia para honrar a Teresa de Calcuta y a todos aquellos que se han preocupado por erradicar la pobreza y motive a muchos a más a adoptar con entusiasmo esa misma labor.
Fuentes:
https://www.un.org/es/observances/charity-day
https://www.accioncontraelhambre.org/es/indice-pobreza-que-es
https://es.wikipedia.org/wiki/Teresa_de_Calcuta
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