La Confederación Patronal de la República Mexicana (Coparmex) rechazó la intención de imponer un arancel del 25 por ciento a las importaciones de acero y aluminio, a partir del 12 de marzo, como lo anunció el gobierno de Estados Unidos, la cual calificó como una acción unilateral que afecta gravemente a la industria siderúrgica y a toda la cadena productiva vinculada a estos insumos esenciales.
El sindicato de empresarios aseguró que estas medidas proteccionistas generan distorsiones en el comercio y afectan a sus propios socios estratégicos. Además, subrayó que es inaceptable que una decisión de esta naturaleza se tome sin considerar el impacto en la integración económica de México, Estados Unidos y Canadá.
“La competitividad de América del Norte no puede verse comprometida por decisiones unilaterales que desconocen los beneficios de la cooperación regional”, enfatizo.
Abundó que la integración comercial entre México y Estados Unidos en la industria del acero fortalece la competitividad regional, impulsa el crecimiento económico y mejora la eficiencia de las cadenas de suministro. En lugar de depender de mercados lejanos o de medidas proteccionistas, esta cooperación permite que ambas economías sean más resilientes y dinámicas en un entorno global en constante cambio.
En este sentido, recordó que en 2018 se impusieron aranceles similares, hecho que dejó claro que estas acciones generan más perjuicios que beneficios. La integración productiva entre nuestros países es un activo estratégico que debe fortalecerse, no debilitarse. La imposición de barreras comerciales no solo afecta a México, sino también a las empresas y trabajadores estadounidenses que dependen del acero y aluminio mexicano.
La Coparmex recalcó que de concretarse esta medida México resultará profundamente afectado, ya que el 75 por cinco de las exportaciones de acero mexicano se hacen a la Unión Americana, lo que pone en riesgo miles de empleos e inversiones.
Además, las cifras evidencian la falta de justificación para esta decisión, pues el balance comercial del acero entre México y Estados Unidos en 2024 arrojó un superávit de 2.3 millones de toneladas a favor de la economía estadounidense. Además, el 52 por ciento del acero que exporta la Unión Americana tiene como destino nuestro país, lo que evidencia el alto grado de integración productiva y la interdependencia de nuestras industrias.
La Coparmex externó su respaldo a los esfuerzos del gobierno mexicano para lograr la exclusión de nuestro país de estos aranceles, y destacó que es fundamental que el diálogo prevalezca y se busquen soluciones que respeten los acuerdos comerciales existentes.
El organismo patronal consideró que en caso de que esta medida no sea revertida, será indispensable que el gobierno de México implemente acciones de defensa comercial. La industria siderúrgica nacional no puede quedar desprotegida frente a un ataque directo a su capacidad exportadora. En el caso de no poder llegar a un acuerdo, se deberán utilizar los mecanismos previstos en el T-MEC.
Finalmente, la Coparmex reiteró su compromiso con la defensa de la industria nacional y de un comercio internacional basado en reglas claras y justas, por lo que seguirá impulsando el diálogo entre el sector privado y las autoridades para evitar medidas que vulneren la competitividad de la economía de México asegurando que el país necesita certeza jurídica y condiciones de competencia equitativas para seguir siendo un socio estratégico confiable en América del Norte.
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