Gracias a la labor de organizaciones civiles, de movimientos nuevos y de 40 días por la vida, aunado a la Ola celeste venida de Argentina, ha crecido la conciencia respecto de la defensa de la vida y la tragedia del aborto.
“Estamos seguros que el fin del aborto se acerca”, señaló Luz María Cortés, coordinadora del movimiento 40 días por la vida en la Ciudad de México ante un nuevo ciclo de campañas de oración frente a distintas clínicas de abortos en la capital del país.
“Estamos viendo muchas más voluntades para sumarse a este gran llamado, mucho más interés, de hecho aquí en Ciudad de México se abren dos nuevas campañas”, señaló Cortés. Agregó que se está haciendo “conciencia en lo que es la tragedia del aborto y que finalmente nunca va a ser una solución, que es una tragedia para la mujer, para el niño que muere y para la sociedad”.
En esta ocasión se organizaron 9 diferentes campañas en la CDMX, y alrededor de 45 a nivel nacional en más de 30 localidades diferentes, que se suman a las miles en todo el orbe por ser un movimiento mundial, mismas que se llevarán a cabo del 26 de septiembre al 4 de noviembre.
Las campañas en la CDMX son Roma, Coyoacán, Xola, La Villa, Azcapotzalco, Lindavista, Anzures, Iztapalapa y Pedregal.
Luz María Cortés considera que las comunidades están más sensibles respecto del tema desde que dieron comienzo las campañas, por medio de su presencia ante estas clínicas y la integración comunitaria y que han tenido un buen crecimiento a nivel Latinoamérica.
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La coordinadora en la CDMX de 40 días por la vida opina que en virtud del trabajo de las organizaciones que apoyan a la mujer que viven embarazos en dificultad, de otros movimientos que se manifiestan en las calles y de 40 días “se ve a la gente más sensible”.
Cortés señaló que “está avanzando la cultura de la vida, vemos más movilizaciones”.
Además subrayó que a nivel continental ha sensibilizado de manera muy importante la defensa de la vida que se dio en Argentina. “De ahí se vienen toda esta famosa ola azul (ola celeste) y que está sumando a más persona que en su vida se había enterado de esto”, comentó.
Indicó que “cada vez somos más los misioneros del evangelio de la vida” y que “ante los ataques contra la vida ya no nos quedamos callados”.
Luz María Cortés comentó que una de esas formas de expresarse es por medio del carisma de 40 días por la vida, a través de la oración, el ayuno, la vigilia pacífica y la integración comunitaria, hacer presencia testimonial frente a las clínicas o en sitios públicos para pedir por la conversión de los que llevan acabo un aborto, de los profesionales que lo practican, por lo que los que lo difunden o financian y por la propia conversión de los voluntarios de las campañas.
Cortés comentó que además de vidas se están salvando almas, ha habido conversiones y cierre de clínicas como la de Iztapalapa, en la Ciudad de México, frente a la que se hacía oración, en la campaña anterior, lo que es “fruto de la perseverancia, de la fidelidad, de la fe y confianza puesta en Dios”.
A nivel mundial el movimiento reporta los siguientes resultados:
14 643 bebés salvados del aborto.
177 conversiones de trabajadores de la industria del aborto.
96 centros de abortos cerrados”.
Además 40 días por la vida agrupa a más de 750 mil voluntarios en 50 países.
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