El hombre que apuñaló a un sacerdote en la Catedral Metropolitana padece un trastorno mental que le impide tener capacidad para entender el carácter ilícito de un hecho, así como conocer y querer realizarlo, por lo cual no está apto para rendir su declaración judicial, determinaron peritos de la Procuraduría de Justicia de la Ciudad de México.
De acuerdo a las investigaciones realizadas por las autoridades, la personalidad del inculpado aún no ha podido ser determinada pues no han podido ser comprobados su nombre y nacionalidad, para lo cual se solicitó la colaboración de las embajadas de Estados Unidos y Francia, así como de la delegación de Migración de la CDMX misma que señaló que hasta el momento en su base de datos no registra ingreso al país de algún extranjero con el nombre que el agresor proporcionó al Ministerio Público.
Durante las diligencias practicadas por el médico legista, el joven que fue detenido en flagrancia por el ataque del padre Miguel Ángel Machorro, se negó a que se le realizara su previa valoración; sin embargo, el galeno hizo una serie de apreciaciones, en las que percibió que el individuo no se encontraba bajo sustancias tóxicas o en estado de ebriedad, por lo que sugirió una revisión psiquiátrica en un hospital del sector salud, la cual se realizó posteriormente en el Hospital Psiquiátrico Fray Bernardino Álvarez, de la Secretaría de Salud Federal.
Derivado de la valoración psiquiátrica el atacante padece trastorno psicótico, lo cual provoca que pierda contacto con la realidad, debido a ello carece de capacidad para declarar sobre los hechos ocurridos el lunes en el interior de la Catedral Metropolitana cuando atacó con un arma blanca a un sacerdote, por ello el agente del Ministerio Público solicitará la medida cautelar que le corresponda con la petición de que sea ingresado en el Centro Varonil de Rehabilitación Psicosocial (CEVAREPSI), en el Reclusorio Preventivo Varonil Sur, para el tratamiento que le corresponda.
Por otra parte, la Procuraduría capitalina mencionó que para continuar integrando la carpeta de investigación sobre el lamentable acontecimiento, el representante social de la dependencia espera que la salud del sacerdote mejore para sumar su declaración a la de los testimonios de tres personas, quienes señalaron al implicado como el probable participante.
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